Ivonne Guzmán: Olimpiadas a la manera ecuatoriana
A tono con la coyuntura deportiva mundial, ya es hora de sacar a la luz a los campeones del dudoso olimpismo local. Esta versión angustiante del medallero criollo, que daría risa si no tuviera consecuencias trágicas, nos retrata de cuerpo entero. ¡Qué feítos que somos!
Va la lista:
Breaking (los antiguos lo conocimos como break dance, pero se oficializó como breaking, cuya traducción literal es rompiendo): en este deporte tenemos un medallista de oro emérito, a quien hasta ahora no le ha salido competidor. Se trata del innombrable, ese que rompía periódicos que daba miedo. Sí, el mismo que dejó rompiendo —haciendo trizas— las arcas fiscales ecuatorianas. El que botó rompiendo y botó jodiendo todo, como se dice en algunas partes de la sierra.
Nado sincronizado: esta exigente disciplina, de precisión milimétrica, tiene en los miembros del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) a sus mejores exponentes. Sincronizados para la troncha, el acomodo, la mala maña, ponen una y otra vez su rutina a consideración del público, que los observa con la boca abierta, ¡qué destreza!